Impresiones literarias I
A partir de ahora y aunque anteriormente ya había escrito algún post con recomendaciones cinéficas y literarias voy a abrir esta nueva sección en el blog llamada "Impresiones literarias" en la que cada vez que haya leído cinco novelas las expondré aquí, dando mi opinión y esperando inspiraros, que nunca vienen mal algunas recomendaciones.
Una historia en Bicicleta de Ron McLarty. Fue uno de esos libros que compras por casualidad, la portada y la sinopsis te dicen algo y aunque nunca has oído hablar de él, decides que debe formar parte de tu librería.
La historia nos habla de una etapa trascendental en la vida de Smithy Ide, cuarentón atrapado en una vida miserable que de repente tras una gran pérdida se ve envuelto en la búsqueda de si mismo. Solo con su bicicleta y a lo largo de algunos meses le sucederán algunas cosas de lo más curiosas, combinando el presente con los recuerdos de su familia recientemente fallecida en un accidente.
Criadas y Señoras de Kathryn Stockett. Conocidísima novela de hace algunos años en la que nos sumergimos en los años 60 del sur de Estados Unidos, costumbres, racismo, el día a día de los negros y sus diferencias con los blancos. Todo ello bien combinado con gracia y a la vez tragedia. Una blanca que quiere ayudar y a la que le cuesta convencer a las criadas negras muertas de miedo por las consecuencias que contar su verdadera historia pueda acarrear.
Los Viajes de Gulliver de Jonathan Swift. Es un libro complicado, un clásico del s.XVIII que todo el mundo no está preparado para leer. Es muy interesante como Gulliver va viajando por diferentes mundos y describiendo detalladamente todas sus singularidades, a la vez que las compara con la Inglaterra del XVIII, sin embargo es una novela que se hace muy pesada por la extensión de la misma. Si bien las primeras mil páginas se llevan con gracia, las más de tres mil siguientes se hacen bastante pesadas.
Lo recomiendo si te atrae mucho la historia o la política, la antropología quizás. No es un libro para la mayoría.
El Libro del Cementerio (partes I y II) de Neil Gaiman. Después de libros tan pesados como Gulliver apetece algo más liviano, y es por eso que me gusta combinar largas novelas con novelas gráficas como es este caso. Adoro a Gaiman y todo lo que hace y si es además combinado con una edición cómo esta aun mejor.
Cada capítulo está dibujado por un ilustrador diferente y es variado y precioso.
La historia nos habla del niño "Nadie", que desde bebé se cría en un cementerio ayudado por los que allí habitan, seres de lo más particular que aportaran una pizca sombría a la vez que tierna en ciertos pasajes de la historia. Nad deberá luchar con el resto de la sociedad, contra sí mismo en ocasiones y contra seres de lo más espeluznantes.
Rinconete y Cortadillo de Miguel de Cervantes. Novela corta de principios del siglo XVII imprescindible y que todo el mundo debería haber leído ya o leer alguna vez, además se lee en un día o dos.
Rinconete y Cortadillo son dos pícaros que llegan a la Sevilla del siglo de Oro a buscarse la vida. Cervantes nos muestra cómo eran las gentes de la época, la vida diaria de los rufianes y mancebas, de los picarones y ladrones y la jerarquía que se establecía, la protección que ofrecían los poderosos y cómo hasta se podía sobornar a los guardias para que pasaran "cosillas" por alto o dieran chivatazos. ¡Qué poco hemos cambiado!
Una historia en Bicicleta de Ron McLarty. Fue uno de esos libros que compras por casualidad, la portada y la sinopsis te dicen algo y aunque nunca has oído hablar de él, decides que debe formar parte de tu librería.
La historia nos habla de una etapa trascendental en la vida de Smithy Ide, cuarentón atrapado en una vida miserable que de repente tras una gran pérdida se ve envuelto en la búsqueda de si mismo. Solo con su bicicleta y a lo largo de algunos meses le sucederán algunas cosas de lo más curiosas, combinando el presente con los recuerdos de su familia recientemente fallecida en un accidente.
Criadas y Señoras de Kathryn Stockett. Conocidísima novela de hace algunos años en la que nos sumergimos en los años 60 del sur de Estados Unidos, costumbres, racismo, el día a día de los negros y sus diferencias con los blancos. Todo ello bien combinado con gracia y a la vez tragedia. Una blanca que quiere ayudar y a la que le cuesta convencer a las criadas negras muertas de miedo por las consecuencias que contar su verdadera historia pueda acarrear.
Los Viajes de Gulliver de Jonathan Swift. Es un libro complicado, un clásico del s.XVIII que todo el mundo no está preparado para leer. Es muy interesante como Gulliver va viajando por diferentes mundos y describiendo detalladamente todas sus singularidades, a la vez que las compara con la Inglaterra del XVIII, sin embargo es una novela que se hace muy pesada por la extensión de la misma. Si bien las primeras mil páginas se llevan con gracia, las más de tres mil siguientes se hacen bastante pesadas.
Lo recomiendo si te atrae mucho la historia o la política, la antropología quizás. No es un libro para la mayoría.
El Libro del Cementerio (partes I y II) de Neil Gaiman. Después de libros tan pesados como Gulliver apetece algo más liviano, y es por eso que me gusta combinar largas novelas con novelas gráficas como es este caso. Adoro a Gaiman y todo lo que hace y si es además combinado con una edición cómo esta aun mejor.
Cada capítulo está dibujado por un ilustrador diferente y es variado y precioso.
La historia nos habla del niño "Nadie", que desde bebé se cría en un cementerio ayudado por los que allí habitan, seres de lo más particular que aportaran una pizca sombría a la vez que tierna en ciertos pasajes de la historia. Nad deberá luchar con el resto de la sociedad, contra sí mismo en ocasiones y contra seres de lo más espeluznantes.
Rinconete y Cortadillo de Miguel de Cervantes. Novela corta de principios del siglo XVII imprescindible y que todo el mundo debería haber leído ya o leer alguna vez, además se lee en un día o dos.
Rinconete y Cortadillo son dos pícaros que llegan a la Sevilla del siglo de Oro a buscarse la vida. Cervantes nos muestra cómo eran las gentes de la época, la vida diaria de los rufianes y mancebas, de los picarones y ladrones y la jerarquía que se establecía, la protección que ofrecían los poderosos y cómo hasta se podía sobornar a los guardias para que pasaran "cosillas" por alto o dieran chivatazos. ¡Qué poco hemos cambiado!
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